De todos es bien conocida la importancia de la Inteligencia Emocional en las empresas. Sin embargo, durante este fin de semana con LAURA MARI en el master Gesta hemos podido comprender lo poco que sabemos de las posibilidades reales que tiene conocer nuestras emociones. Hemos trabajado fundamentalmente el modelo de Salovy y Meyer, incluso todos mis alumnos han realizado la prueba MSCEIT Mayer-Salovey-Caruso Emocional Intelligence Test, una prueba que realmente se basa en el enfoque de habilidades en la inteligencia emocional, y que es tal el detalle del feedback que da que creo tenemos todos trabajo reflexionar este verano. Sin quitar importancia al modelo competencial de Goleman o a otras pruebas de Inteligencia Emocional, centrarnos en este modelo de habilidades: 1)identificar; 2) usar; 3) entender; 4) gestionar, supone una brillante aproximación a las emociones de las personas. Para colofón final de la sesión Laura trajo un aparato que medía la coherencia cardiaca (¿recuerdan el brillante libro de David Servan-Schreiber sobre curación emocional?). Fue realmente interesante observarnos todos en nuestra propia regulación cardiaca y la influencia de las emociones. Gracias Laura, brillante trabajo.