Siempre hemos oído hablar de las virtudes y efectos en el rendimiento de la inteligencia emocional y de las emociones bien gestionadas en la empresa. Pero desde luego, la intervención de los cuatro ponentes del 15 de mayo en el salón de actos de ADEIT ha dejado clara una cosa, gestión de las emociones individuales y colectivas es más que necesarias en las empresas. Todo comenzó con la intervención la presentación de Manuel Reig director de Proselección y miembro de la junta directiva de aedipe. La primera conferencia fue del presidente de AECOP (la asociación española de Coaching Ejecutivo más importante a nivel nacional y con mayor número de coaches que está vinculada con la asociación europea EMCC, European Mentoring and Coaching Council), que puso en tela de juicio las diferentes conceptualizaciones y definiciones al respecto desde los diccionarios, indagando la falta de comprensión del verdadero fenómeno de la palabra pasión. La empresa pide pasión, pero Manuel Seijo analizó las amenazas de la pasión en las organizaciones distinguiendo tres áreas: (1) por exceso y abandono; (2) por tensión y provocación; (3) y por minar la autoridad del grupo. Desde su punto de vista, líderes con corazón permiten a otros perseguir sus pasiones.
La segunda conferencia de Jose I. Villadóniga, invitado por Manuel Seijo con el cual realizaron procesos de coaching ejecutivo, narró con datos técnicos la importancia del coaching ejecutivo en la seguridad de las empresas con datos precisamente de su organización Tecnatom. Tal y como expresó, ¿por qué la importancia del coaching? Por los resultados. Así amplió la responsabilidad de los resultados al clima y la cultura organizativa con demostraciones reales a través del Organizacional Cultura Inventory (OCI).
En tercer lugar intervino Laura Mari de IEi Inteligencia Emocional Interpersonal. Su elocuencia y oratoria, control de la materia, y experiencia profesional sedujo desde el primer lugar al auditorio de casi 100 personas. Con experiencias a través de la música y con ejemplos concretos y constantes, distinguió el modelo de IE basado en habilidades del basado en competencias. “Necesitamos 21 días para practicar nuestros cambios” (el arte del Kaizen) argumentaba en público, y distinguió nuestro yo ideal (corte prefrontal izquierdo) y nuestro yo real (cortex prefrontal derecho). Concluyo con la frase “existe al menos un lugar en el universo que puedes mejorar y ese eres tú mismo”.
En último lugar Jordi López puso de nuevo toda su experiencia en Roca para transmitir la importancia de gestionar bien las emociones en las organizaciones. A través de su análisis de la productividad en las fábricas de Roca, analizó el papel de las transmisión de los valores y códigos culturales a los empleados para general cambios actitudinales. La fuerza del outdoor training y el entrenamiento de la base de las organizaciones puede tener efectos realmente importantes y significativos en la productividad. ¡Magnifico mensaje Jordi!
Bueno ni que decir que disfruté mucho de una jornada de la que aprendí desde el comienzo hasta el final. Esta jornada tuvo desde marco teórico científico hasta ideas a compartir hasta experiencias de éxito. Gracias a los cuatro ponentes por su participación e ilusión que transmitieron en todo momento.